Una baja participación marcó el proceso electoral de primarias en Ñuble, que dirimió, por un lado, la carta a Gobernador Regional de la oposición bajo el pacto Unidad Constituyente y por otro la primaria de Chile Vamos que eligió al candidato que competirá por la alcaldía de Chillán Viejo.
De acuerdo a los datos del Servel, en la oposición se impuso el ex director de Serviu, Óscar Crisóstomo (PS) quien obtuvo 3.841 votos, lo que equivale a un 38,7%. En segundo lugar quedó el actual Consejero Regional, Hernán Álvarez (Ind-PPD) con 2.081 votos (21%); en tercer lugar Cristian Ortiz (PR) con 2.037 (20,5%) y en último lugar Hérex Fuentes (DC) con 1.945 (19,6%).
En Chile Vamos se definió la carta a la alcaldía de Chillán Viejo entre tres nombres. Se impuso Rodrigo Arzola (Ind-RN) con 523 votos (54,7%); le siguió Patricio Parejas (UDI), actual director Subdere Ñuble con 257 votos (26,8%) y Cecilia Ortiz (Ind-PRI) con 176 votos (18,4%).
¿Qué función cumple el Gobernador Regional?
Recordar que el Gobernador Regional será electo por sufragio universal en elección directa (la primera será el 11 de abril del 2021) y durarán cuatro años.
Será la autoridad ejecutiva del Gobierno Regional. Preside el Consejo Regional y debe coordinarse con los demás órganos y servicios públicos. Tendrá igualmente la coordinación, supervigilancia o fiscalización de los servicios públicos que dependen o se relacionan con el Gobierno Regional.
Además, debe asignar los recursos de los programas de inversión del Gobierno Regional, de los programas de inversión sectorial de asignación regional y aquellos que corresponda en virtud de transferencias de competencias que haga el Presidente de la República.
¿Qué pasa con los Intendentes?
Se acaba la figura de los intendentes y en su reemplazo se crea el cargo de delegado presidencial regional, como representante del Presidente de la República. De esta forma, el delegado presidencial regional ejerce el gobierno interior de cada región. Es el representante natural e inmediato del Presidente de la República en el territorio de su jurisdicción. Será nombrado por el jefe del Estado y se mantendrá en sus funciones mientras cuente con su confianza. También se acaba la figura de los gobernadores provinciales.