Carabineros debió intervenir en el paseo Arauco, luego de recibir una alerta del municipio, informando sobre la instalación irregular de comerciantes ambulantes en la zona. Los vendedores no contaban con los permisos correspondientes y estaban instalando toldos y carpas con el fin de ofrecer productos y alimentos en el marco de la Fiesta de la Longaniza.
En total, las autoridades procedieron al retiro de alrededor de 50 toldos no autorizados.
Aunque algunos de los vendedores expresaron su descontento ante la situación, no se produjeron alteraciones graves al orden público, y no se registraron detenciones durante el operativo.
Este procedimiento se llevó a cabo con el objetivo de resguardar la seguridad de los comerciantes autorizados, quienes cuentan con los permisos necesarios para operar en el evento, y garantizar un ambiente seguro para los asistentes.