El miércoles 11 de abril a las 12:00 horas, el Salón de Honor de la Casa Central de la Universidad de Chile acogerá la ceremonia donde familiares de 98 estudiantes detenidos desaparecidos y ejecutados políticos durante la dictadura (1973-1990), recibirán de manos del rector, Ennio Vivaldi, sus títulos póstumos.
Fue en 2017 cuando la institución dio a conocer el decreto exento que permite estas distinciones simbólicas. Desde entonces, un comité interdisciplinario ha estado enfocado a investigar y tomar contacto con las familias y excompañeros de las víctimas, quienes han agradecido esta medida de reparación y búsqueda de justicia, en la que ha sido fundamental la labor de preservación de documentos que hizo durante años el Departamento de Pregrado de la época para evitar que fuesen destruidos en el período en que la casa de estudios estuvo intervenida.
Lejos de ser un cierre, la instancia del miércoles 11 iniciará un proceso permanente, abierto a la comunidad, a la que desde la Universidad invitan a aportar testimonios, documentos e información que posibilite la reconstrucción de la memoria histórica.
A nivel administrativo, se pretende que nadie que cumpla con los requisitos establecidos en el decreto universitario, quede fuera de la medida. Por ello, cada caso es estudiado de manera minuciosa, comenzando por la corroboración de su condición de estudiantes, pesquisa e indagación en archivos y registros documentales, hasta investigaciones complejas cuando se requiere, todo a cargo de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la institución. Los canales de información y antecedentes se mantendrán abiertos para quienes deseen entregar antecedentes esclarecedores.
“Para la Universidad este acto es de la más alta importancia. El sentido de esta reparación es restablecer el lazo roto entre cada uno de los estudiantes y la institución universitaria que los cobijó durante sus estudios universitarios. Queremos enviar un mensaje claro, cada uno de nuestros estudiantes es valioso y el lazo con su Universidad no puede ser destruido por quienes les asesinaron o desaparecieron”, Claudio Nash, coordinador Académico de la Cátedra de Derechos Humanos